jueves, 21 de enero de 2010

Prensa 17: Helados.

Los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022 se han convertido, en una semana, en objetivo común para Aragón y Cataluña.
A continuación, un extracto del artículo que he ilustrado en El Periódico de Aragón sobre este tema. El texto es de M. Vallés, M. Valiente y A. Ibáñez.
“No hay nada mejor para valorar lo que uno tiene, que alguien intente arrebatártelo. Y si ese alguien es Cataluña, todavía más. Nadie en Aragón se acordaba el martes del proyecto de olimpiadas. Pero tras el anuncio de Jordi Hereu (alcalde de Barcelona), Gobierno y Ayuntamiento de Zaragoza lo abrazaban cual tesoro.

Un tesoro que ahora luce mucho más, claro. Pocos sabían, incluso en Aragón, que el 2022 era fecha olímpica para la comunidad. Pero la irrupción de Barcelona, con todo su potencial mediático, ha hecho que la pugna entre la capital catalana y Zaragoza trascienda más allá de las fronteras. A día de hoy, todo el mundo lo sabe. Aragón y Cataluña quieren unas olimpiadas de invierno.

Se esperaba algún movimiento por parte del consistorio leridano, que ya hace unos meses anunció su intención de presentar una candidatura alternativa. Pero con Barcelona ni se contaba ni se la esperaba.

En principio, el apoyo español va por la candidatura aragonesa, porque se lleva trabajando hace más de 20 años y hay mucho hecho”.